Dolor de nuca y cuello por procesos de artrosis, hernias de disco, escoliosis avanzadas.
Hay que reconocer que las última literatura muestra que muchas de estas enfermedades avanzan por abandono del propio paciente. Muchas veces en el consultorio alguien te dice:
“Cómo me dolía llevar el brazo hacia arriba, dejé de moverlo y ahora, ya pasaron dos años, el brazo se fijó”.
Paciente
Esto es abandono, el paciente piensa que va a mejorar sin ayuda, sin orientación… y si algo no se usa se atrofia.
Con el cuello pasa lo mismo, el paciente comienza a enamorarse de los analgésicos, pero no paran la enfermedad, la tapan. Un buen día se dan cuenta que el cuerpo se acostumbró a los analgésicos y que el cuello ya no gira, o rota casi nada… pero la realidad es que, hace meses el cuerpo le dio señales y el paciente decidió no hacer nada.
Las contracturas del cuello empeoran el cuadro
Si vos tenés una artrosis, artritis, hernia de disco, etc. etc. y subrís una contractura muscular que es gatillada normalmente por algo emocional (peleas, angustia, miedo, etc) o por respuesta al mismo dolor. Tus músculos del cuello comprimen la articulación dañada y el dolor aumenta a sus límites más altos.
“Me duele el cuello” lo soluciono con un fármaco?
La verdad que esta es la opción más simple, y cómo es simple funciona por un tiempo… La gente ama los fármacos hasta que al usarlos crónicamente empiezan a ver que traen más efectos secundarios y sus resultados de alivio del dolor se reducen… y principalmente te das cuenta que no estás tratando el problema real.
¿Ejercicios para el cuello o elongación de cuello?
Ambos, porque cuando un paciente tiene patologías cervical avanzada, uno busca devolver la flexibilidad al cuello. Buscar que el cuello se mantenga más parecido a un resorte que a una cuerda.
El medicamento para el dolor no es sinónimo de ejercicios, ni de elongación. Muchas veces el paciente no quiere hacer los ejercicios o la elongación porque le aumenta el dolor al otro día… Claro… es obvio… Estamos rompiendo adherencias que hay entre los músculos para que recupere su circulación, la conducción nerviosa, la capacidad de contraerse y relajarse.
Esto es un trabajo y obvio que va a doler, porque el paciente se abandona por mucho años y vuelve cuando el cuello está tenso y tieso. Tiene sentido en este caso usar un analgésico para que el post ejercicio sea menos doloroso… pero estamos con un claro objetivo que es buscar lograr flexibilidad.
Ahora si tomo medicamentos solo para tapar el dolor y no hago nada por mejorar la articulación. Simplemente mañana va a estar peor, va a necesitar más medicación para seguir tapando el deterioro… que no está dispuesto a corregir.
Almohadas para reumatismo
Las almohadas viscoelásticas ya no son útiles en casos avanzados, son muy duras. Al haber músculos tiesos pueden comprimir las cervicales y generar dolores irradiados hacia los brazos cuando el paciente se levanta en la mañana.
Lo ideal es que el paciente duerme alineado, con una almohada de látex formulada para patologías cervicales, estas almohadas son más blandas de lo normal y no producen compresión de la articulación. Dan una contensión sin compresión que evita el dolor irradiado a los brazos.
Muchas veces, el paciente no tiene muchas posibilidades de revertir el daño que hay, incluso la columna ya no disocia, quedo fijada, se acuestan y la cabeza no baja hasta la almohada. En estos casos… obligatoriamente tenemos que usar dos almohadas, el paciente dormirá por prescripción semi sentado, pero en estos casos la almohada fisiológica de látex puede adaptarse y darle un mejor apoyo. En estos casos muchas veces los profesionales buscamos hacer tratamientos sintomatológicos, porque el caso avanzó demasiado. El látex es la mejor herramienta.
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